El artista contemporáneo chino Li Xiaofang utiliza porcelana para hacer arte portátil, hermosas esculturas de porcelana que rinden homenaje al pasado con mirada hacia el futuro. Xiaofang toma cientos de fragmentos de porcelana, algunos que datan de las dinastías Song, Ming y Qing, y los entrelaza en hermosas mixturas, creando vestidos de porcelana que actúan también como armaduras. Su arte usable resulta ser una obra maestra de la escultura.
Unidos con delgados hilos de alambre y forrados en cuero, cada una de las piezas está perfectamente encajada con otra, precisando formas exactas para hacer las curvas de los vestidos, pantalones y hasta sombreros militares que ha creado, deleitando a su vez con unos patrones de color realmente fascinantes, considerando que es a base de puros trozos de porcelana de diferentes diseños y colores.
Radicado en Beijing, el artista ha expuesto en el Museo Metropolitano de Arte y ha colaborado con Lacoste y Alexander McQueen. Un visionario en su campo,”estos fragmentos azules, bañados en los cielos soleados del socialismo y acariciados por las frescas brisas contemporáneas que soplan desde el oeste a lo largo de la capital, asumen una serie desconcertante de posturas como artículos de moda que ingresan al nuevo siglo”, declaró en una oportunidad este destacado artista.