Liliana Iturriaga es una de las principales exponentes de arte cinético en Chile. En 1973 se fue a vivir a Venezuela y retornó en 2008. Desde ese año a la fecha ya ha montado más de 30 exposiciones tanto en Chile como el extranjero. Ahora la artista sorprende con «Concéntricos», una muestra que incluye 21 piezas algunas en tela, mientras que otras son esculturas acrílicas retroiluminadas.
Se trata de una exposición que indaga en torno al movimiento lineal y la vibración óptica, en correspondencia con la centralidad que da sentido a las formas circulares, este estudio llega tan profundo en el dominio de la vibración que logra hipnotizar con solo unos segundos de apreciación de las obras. Dejarse llevar puede ser una experiencia embriagadora.
En esta exhibición Iturriaga “se anima a retomar algunos aspectos imprescindibles de la geometría clásica, conviviendo con observaciones y búsquedas anteriores, más espontáneas y liberadas”, explica Patricio M. Zárate curador de Concéntricos que llegará al Bellas Artes con un trabajo que en todo su recorrido utiliza elementos circulares que se van superponiendo, uno sobre otros, y que siempre remiten a un centro.
Al llegar al salón de video mapping, el impacto es aún mayor. La sensación de adrenalina se vuelve inevitable. Basta con acercarse un poco para comenzar un viaje tridimensional del cual no es fácil regresar. Personalmente, sentí un efecto narcótico increíble.
“Me parece fabulosa la incorporación del video mapping, es un festín de luz y movimiento. Con este mecanismo la obra se toma todos los espacios haciendo que la experiencia sea envolvente, que la gente se adentre en la pieza tornándose aún más contemplativa y reflexiva, ya que por medio de una proyección en la pared el público puede entender visualmente su contenido sin necesidad de buscar un texto. Cuando tienes una obra en movimiento le das otra connotación a la exposición, otra manera de expresar el arte cinético, que justamente aborda el movimiento”, explica Iturriaga.
Para la realización de esta pieza se utilizó un videoproyector Epson Pro L1405U de 8.000 ANSI lúmenes con resolución Full HD y emulador de 4K. “Este proyector láser está hecho y diseñado para funcionar 24/7, lo cual lo hace perfecto para exposiciones de muchas horas diarias en un museo. Además, ofrece un muy buen contraste con un gamut de colores muy amplio, algo fundamental al tratarse de una exposición de arte cinético”, señala Luis Valenzuela, Channel Manager VAR de videoproyección de Epson.
“El cinetismo siempre ha tenido un vínculo con la generación del movimiento, a partir de fenómenos ópticos, los artistas cinéticos han estudiado la biología de la percepción y cómo opera frente a ciertos fenómenos. Esta obra quiere ser una experiencia que vaya más allá de ser una mera proyección en el espacio, busca generar otro tipo de reacción, de acuerdo a cómo se van proyectando las diferentes capas y secuencia de colores de la obra”, detalla Manuel Basoalto, quien en colaboración con la artista, trabajó en esta obra audiovisual junto a su equipo para crear esta pieza que forma parte de la exposición.
La muestra ya se puede visitar totalmente gratis hasta el hasta el 31 de julio, en el ala norte del Museo Nacional de Bellas Artes de Santiago.
¡100% recomendada para fanáticos de la psicodelia!